martes, 29 de septiembre de 2009

SÁBADO 3: Sexo, amor y otras perversiones

Esta vez traemos al cineclub una comedia hecha de pedacitos; es decir, una película compuesta por ocho historias realizadas por ocho directores:
Sexo, amor y otras perversiones

Nos acompañará Ernesto Murguía, guionista del fragmento titulado "Max Viagra", dirigido por Daniel Gruener.

Los esperamos en nuestra sede habitual, la Escuela de Escritores de Sogem.

¡Abróchense los cinturones!

sábado, 26 de septiembre de 2009

Bajo la sal

por Lila Nieto

Esta tarde, a pesar del lloriqueo de la lluvia y tras haberse roto en añicos la jarrita de nuestra cafetera, el público llegó a disfrutar de este thriller policíaco hecho en México, y a platicar con Mario Muñoz, el director de la cinta.

Una de las cosas que más impactaron fue la construcción del personaje de Trujillo, el policía que llega enviado desde la ciudad a resolver los asesinatos de mujeres en Santa Rosa de la Sal. A uno de los integrantes del público, el personaje le recordó al Commissaire Edouard Coleman, el policía encarnado por Alain Delon en la película "Un flic" (1972), del francés Jean-Pierre Melville. Trujillo es un personaje con un pasado oscuro, un policía que no ha quedado limpio de la corrupción del sistema al que pertenece pero que tampoco ha olvidado el valor de su trabajo, un hombre acabado cuya vida no tiene otro sentido que el ser policía, un hombre que busca la redención y que simboliza el anhelo de justicia que tenemos todos los mexicanos, el anhelo de redimir al sistema judicial (y el anhelo de redención de los propios policías) en un país devorado por la corrupción, la impunidad y la violencia.

"Zurita tiene un rostro maravilloso para el papel, como salido de una película de Michael Mann". Desde que inició el proyecto, Muñoz quería rescatar actores de cuando él era un chavo, y la historia de cómo Humberto Zurita se integró al proyecto es curiosa: en realidad, fue su hijo quien audicionó para el papel de Víctor, y fue su primera audición, por lo cual su padre lo ayudó a prepararse. Durante la audición, comentó que a su papá le había gustado mucho el guión, y al final fue él quien se quedó en la película, y se prendió muchísimo con el proyecto. Como parte de su preparación para el personaje, Zurita no sólo sostuvo diversas pláticas con policías, sino que aprendió a manejar armas con ellos y vivió dos meses en el pueblo de Santa Rosalía, Baja California Sur.

Lo que Muñoz buscaba en esta historia era encontrar un punto medio entre un cine demasiado terrible y filmes frívolos y evasivos, abrir una vía nueva que no resultara inverosímil dentro de la realidad mexicana. "Bajo la sal nunca se pensó como una película de denuncia", más bien se trataba de buscar un cine que conectara con la gente y permitiera experimentar con el género del thriller, de adaptarlo a la idiosincracia y situación del país a partir de fórmulas conocidas, es decir, a partir de la exploración de un género con todos sus elementos. "El punto es el grado de compromiso; si te lo tomas en serio empiezas a iluminar aspectos de la realidad humana sin proponértelo", dijo Mario. Sin embargo, esta película toca temas tan dolorosos y delicados como los feminicidios de Ciudad Juárez, la prostitución, la violencia contra las mujeres, la corrupción y la violencia en las escuelas, la ruptura de las familias y la incapacidad del sistema judicial de proteger a la población. "El arte y la narrativa cinematográfica pueden funcionar como espejos de nuestra sociedad a partir de algo que no se retrate de manera totalmente horrible sino real, que impacte e invite a la reflexión".

Volviendo al tema de los policías, Mario recordó que "sólo hasta que estás con ellos en un campo de tiro empiezas a entender su realidad; el medio en el que se desenvuelven es completamente corrupto, y el poli bueno no es el héroe que no se ensucia, sino el que no pierde el sentido de lo que está haciendo". En cuanto al personaje de Trujillo, que encarna esta dualidad, que desempeña un trabajo que lo ha obligado a sacrificar su vida personal, Mario comentó: "es lo que sucede con los policías, su vida personal está destruida y realmente lo único que tienen es ser policías". Dicho gremio quedó muy conmovido con la película, en especial con el personaje de Trujillo. Esperemos que esta historia los invite a la reflexión.

Mario Muñoz estudió Comunicación en la Universidad Iberoamericana, y se tituló en 1993. Trabajó muchos años como director de comerciales, donde adquirió extensa experiencia. El proyecto de Bajo la sal surgió en el año 2000 a partir de un concurso de argumentos que Muñoz convocó, y del cual fue elegido el argumento de Ángel Pulido titulado "La venganza del valle de las muñecas", que se incluyó como título de la animación de la película. Pulido, arquitecto de profesión y oriundo de Guanajuato, fue compañero de escuela del poeta Pablo Molinet, quien fue acusado falsamente en 1992 de asesinar a su sirvienta, siendo todavía un adolescente, y a quien se le pretendía imponer una larga sentencia durante la gestión del entonces gobernador interino Carlos Medina Plascencia.* Este caso impactó mucho a Ángel Pulido, por lo que su argumento fue una especie de sublimación de dicha experiencia. Cuando se comenzó a escribir el guión de Bajo la sal, los feminicidios de Juárez no estaban tan presentes en la sociedad, pero al cabo del tiempo los casos fueron aumentando y se volvieron un foco rojo nacional. De hecho, el argumento original sucedía en Michoacán; Mario Muñoz se fue alejando hasta encontrar un lugar en donde crear una ficción que resultara creíble, y ese lugar fue la salinera más grande del mundo, ubicada en Guerrero Negro, Baja California Sur.

El proceso de creación de la película duró ocho años. Los primeros cinco años se dedicaron al trabajo de guión, que oficialmente tiene 22 tratamientos y extraoficialmente alrededor de treinta. Ángel Pulido trabajó estoicamente hasta el décimo tratamiento, aproximadamente, y luego decidió dar su bendición a Mario y dejar la historia en sus manos. Al respecto, Mario dijo, "hacer un guión es un trabajo muy cansado, es como someterte a tortura por voluntad propia", pero Ángel quedó satisfecho con el trabajo, pues aunque cambió mucho desde su argumento, "conservó la esencia". Marina Stavengahen fue asesora del proyecto, y dio gran apoyo a su desarrollo. Y también, recuerda Mario, existe una intuición que te guía, aunque a veces necesitas que alguien te diga lo que ya sabes. El guión quedó tan estrechamente estructurado, que casi no hubo cambios durante el rodaje, pues era como "una casa de naipes": si quitas una carta se colapsa toda la casa, así que en la filmación fue mejor idea confiar en que el guión era de hierro.

En cuanto al trabajo con los actores, Muñoz quedó muy satisfecho. Había tomado un par de cursos en Los Ángeles que le ayudaron mucho en este proceso; uno de los cursos se llamó "Acting for directors" (Actuación para directores), impartido por Judith Weston. Este curso se trataba justamente de poner a los directores en los zapatos de los actores bajo la dirección de Weston, de modo que se pudieran dar cuenta de lo que es el proceso en carne propia, de cuáles de sus propias técnicas de dirección funcionan para el actor y cuáles no sirven para nada o incluso resultan contraproducentes. El trabajo de ensayo con actores para cine es muy distinto del ensayo para teatro, pues mientras en teatro se trata de ensayar muchas veces hasta que la puesta en escena corra de principio a fin dentro de un ritmo y una serie de marcas (donde la espontaneidad es un factor humano inevitable), en el cine el ensayo busca la conexión de los actores con el guión, con los otros actores y con el director, y se trata de lograr la espontaneidad, la incertidumbre, en todo momento; si los actores no pueden provocar en sí mismos las reacciones espontáneas, el director debe ayudarlos a hacerlo. Gracias a este trabajo, los actores pudieron identificarse profundamente con sus personajes, incluso aquellos que al principio sentían que no tenían nada que ver con ellos, como Ricardo Polanco con el personaje de Víctor. Humberto Zurita, un actor con más de 30 años de trayectoria acostumbrado a dirigirse a sí mismo, se entregó por completo y logró conectarse muy profundamente con su proceso creativo al dejarse dirigir por Mario: "hacía mucho que no sentía esto", le dijo a Mario refiriéndose a sus tiempos universitarios en los que realizaba exploraciones profundas en su construcción de personajes.

La animación, dirigida por René Castillo, una "peliculita" dentro de la película, resulta al mismo tiempo un homenaje al cine y una metáfora del mundo interior de Víctor que muestra su transformación al ir mutando desde el terror que recuerda el género del "slasher film" (Viernes 13, Pesadilla en la calle del infierno, El resplandor, y otras referencias como Twin Peaks, Terciopelo azul y hasta Thriller de Michael Jackson) hasta una historia romántica. También, al absorber los episodios más violentos de la historia así como el final feliz que no sucede como Víctor lo hubiera deseado, la animación ayuda a mantener el tono sobrio y oscuro de la historia. De hecho, la imagen de Víctor besando a Isabel muerta marcó el tono de la película desde el principio. El final no busca complacer al público sino más bien resolver el conflicto sin llegar a "chorrearlo" con un melodrama inverosímil.

El filme se estrenó con 300 copias y se mantuvo seis heroicas semanas en cartelera. Las dos primeras por ley, al ser ópera prima, y las siguientes cuatro porque logró sostenerse en primer lugar de audición, incluso por encima de los estrenos hollywoodenses. Sin embargo, hubo los habituales sabotajes de las exhibidoras, como reducir horarios, pasarla a salas pequeñas y alejadas, y todas las mañas que ya conocemos. Una vez más, surgió el comentario de que los cineclubes son una alternativa a la mala distribución y exhibición; Mario incluso mencionó que en nuestra sala la película "se escuchaba mejor que en el cine", y se sorprendió al enterarse de que la Procuraduría Federal del Consumidor aplica una multa a los cines en caso de que proyecten una película con fallas en el sonido o la imagen.

Finalmente, un integrante del público comentó que se sentía orgulloso y sorprendido de la calidad de este filme, pues "el cine mexicano está dormido; hubo muy buen cine en México" que ya no se recuerda. Mario Muñoz respondió que, en parte y a su modo de ver, se trata de una falta de autoestima y una pérdida de identidad. "Si analizas el top ten de las películas mexicanas actuales -Arráncame la vida, Una película de huevos, etc.-, te das cuenta de que existe en todas un elemento absolutamente mexicano", por lo que se deben buscar valores de los cuales "colgarse" como símbolo de nuestra identidad para seguir cultivándola.

____________________
*Molinet se había hecho sospechoso ante las autoridades panistas por sus lecturas de libros "satánicos" como "Por qué no soy cristiano" del filósofo y matemático Bertrand Russell, y pasó dos años encarcelado hasta que tuvo que ser liberado en 1994 por órdenes judiciales superiores. Sobre ese caso, Paco Ignacio Taibo y Víctor Ronquillo publicaron el libro "El caso Molinet", en editorial Planeta.

martes, 22 de septiembre de 2009

SÁBADO 26: Bajo la sal


Este SÁBADO 26 DE SEPTIEMBRE DE 2009, como parte de nuestro ciclo "Cine mexicano contemporáneo", proyectaremos un thriller policíaco que trata un tema similar a los feminicidios de Ciudad Juárez, y rescata a un actor que ha estado perdido de las pantallas y los escenarios por un buen rato, Humberto Zurita.

La obra es BAJO LA SAL, de Mario Muñoz, quien estará con nosotros para compartir su experiencia y debatir sobre este interesante filme.

El equipo de filmación tardó en trasladarse cuatro días hasta la salinera donde se filmó debido a lo inhóspito del camino y a que tuvieron que viajar por tierra, mar y aire para llegar.

De acuerdo con Mario Muñoz, la película demoró dos años en comenzar porque se eligieron minuciosamente los actores que interpretarían a los personajes principales.


BAJO LA SAL
(México, 2008, 110 min.)

Dirección: Mario Muñoz
Guión: Ángel Pulido y Mario Muñoz
Fotografía: Serguei Zaldívar Tanaka
Música: Fernando Bonasso
Animación: René Castillo
Edición: Jorge García
Reparto: Humberto Zurita, Plutarco Haza, Irene Azuela, Emilio Guerrero, Ricardo Polanco, Julio Bracho

En Santa Rosa de la Sal, un poblado ligado a una salinera gigantesca, comienzan a aparecer cadáveres de mujeres en los pantanos de sal. Salazar, el jefe de la policía local, se espanta con tal hecho y pide ayuda a la capital, de donde llega su excompañero, el comandante Trujillo, quien arrastra algo negro en su pasado...

http://es.wikipedia.org/wiki/Bajo_la_sal

Los esperamos en nuestra sede habitual, la Escuela de Escritores de Sogem.

¡Abróchense los cinturones!

domingo, 20 de septiembre de 2009

Morirse en domingo

por Lila Nieto

Durante el debate que se abrió tras la proyección de esta cinta, una integrante del público comentó que, la primera vez que la vio, se divirtió muchísimo, pero que en esta segunda ocasión su lectura fue distinta, pues aunque le sigue pareciendo divertida, también le pareció aterradora, estremecedora y profunda. Efectivamente, esta no es una comedia "de pastelazo", ni una farsa, sino que nace de las contradicciones de la vida misma. Cada vez que la ves tiene una lectura nueva, y ese, dijo Gruener, "es mi objetivo como autor".

La obra muestra distintos niveles de la existencia: una feria nocturna, un basurero, una alcantarilla, dos familias totalmente distintas, jóvenes desmadrosos, incluso nos lleva a Cuba, donde un político se esconde tras haberse hecho pasar por muerto. La cinta es muy rica en esa variedad de ambientes y realidades. El muerto, de hecho, cuya situación es a la vez cómica y terrible, va deteriorándose a lo largo de la cinta, y termina simbolizando una sociedad que se degenera. Sin embargo, la película no busca agredir al público, sino en todo caso provocar la reflexión, la identificación profunda; por eso no se va solamente con lo crudo ni solamente con lo chusco. De hecho, algunas escenas rayan en lo poético y lo sublime para retratar, por ejemplo, la difícil relación entre padres e hijos, o la escena de amor dentro de un ataúd, donde la serpiente se muerde la cola. De hecho, en francés, la culminación del amor se conoce como "la pequeña muerte".

"Resulta que es más útil un cuerpo muerto que uno vivo". Los muertos se utilizan para estudiarlos en las universidades, y también para fabricar funerales falsos para personajes que buscan desaparecer de las estadísticas, como ha sido el caso de algunos políticos e incluso, se rumora, de algunos narcotraficantes.

La parte de la universidad se filmó en la Facultad de Medicina del Instituto Politécnico Nacional (mejor conocido como "el Poli") con cadáveres reales. "El olor, el ambiente, es fuertísimo; se impregna en la nariz durante semanas". Fernando Becerril, que personifica tanto al padre de Carlos como a su tío muerto, tuvo que meterse junto a un cadáver en un refrigerador. Silverio Palacios se entrenó durante unos ocho meses en funerarias, e incluso llegó a embalsamar, todo con tal de aprender a manejar los cuerpos como su personaje, Joaquín, lo requería. Maya Zapata, que interpreta a la hija de Joaquín, entraba a velatorios y les pedía permiso para dormirse un rato dentro de algún ataúd durante los aproximados seis meses de preparación para su personaje.

El guión surgió de dos historias verdaderas. La primera le sucedió al guionista, Antonio Armonía, de quien Gruener se hizo amigo en el Centro de Capacitación Cinematográfica, donde ambos estudiaron. En una ocasión, Antonio le llamó a Daniel sintiéndose perseguido por una idea terrible: su tío había muerto un domingo y su padre le había encargado que se quedara a la cremación, pero él no lo había hecho, y sentía que las cenizas que les habían entregado no eran de su tío, pero jamás podría comprobarlo ni confesárselo a su padre. La otra historia surgió durante la pequeña investigación que Armonía y Gruener realizaron respecto del negocio de la muerte, y se trata de una familia en el estado de Morelos que encontró en el anfiteatro de la universidad a un familiar al que supuestamente habían cremado. Veintiocho días después había un primer guión, y seis semanas más tarde, una oferta para levantar el proyecto que decidieron rechazar.

Finalmente, un año y unos seis tratamientos después, levantaron el proyecto con el apoyo de Fidecine, Altavista Films y la distribuidora Gussi. La película se rodó en ocho semanas y fue un proyecto ambicioso: con 58 personajes, sesenta y tantas locaciones, efectos especiales y un costo aproximado de 22 millones de pesos, lo cual habla de lo que se puede hacer con un presupuesto promedio para el cine nacional, y ridículo, por la calidad del trabajo, para otros países. "Para hacer cine se necesita una buena historia, convicción y un equipo que te respalde", nos dice Daniel Gruener.

"Morirse en domingo" ha sido un éxito en el extranjero; de hecho, en España se considera una película de culto. Aunque en general en los festivales el género de la comedia se considera "menor", esta película se estrenó en el festival de San Sebastián, y resultó la tercera más taquillera. "La película estuvo de gira un año y el público extranjero se reía más que el mexicano; es falso que los mexicanos nos reímos de la muerte, aquí fue donde menos se rieron, y luego encontré que Octavio Paz ya lo había dicho; es que somos poetas de la trampa y no nos gusta vernos en el espejo". Como dato chusco y para redondear lo que la película misma retrata, Daniel platicó de un entusiasta que lo abordó poco después del estreno en México y le dijo, lleno de orgullo, que la había conseguido en una magnífica edición pirata y la había proyectado unas veinte veces con gran éxito entre su público. Daniel sólo deseó que el hombre hubiera, por lo menos, cobrado las entradas.

Después de la función, Gruener comentó que hacía mucho tiempo que no veía la película: "La vi como si fuera el trabajo de otro; hasta me interesó". La ve con cariño, pues cada escena le trae recuerdos de lo que sucedió detrás de ella, las dificultades, las decisiones que se tuvieron que tomar, etc. Como en la escena de los perros, para la que tuvieron que esperar como seis horas hasta que "les dieron ganas".

Una complicada escena de efectos especiales fue la de transición, en que la cámara sale de un espejo al exterior nocturno para pasar al día y entrar por la ventana de la casa de la otra familia. Esta escena es un capricho interesante, pues tiene toda una historia detrás: cuando Daniel Gruener filmó su ópera prima"Sobrenatural" -fotografiada por Rodrigo Prieto- a sus 25 años de edad (siendo el debut más joven después de Ripstein), resultó ser un éxito en Estados Unidos, por lo que le pidieron que hiciera el remake en versión gringa. A él no le interesó la propuesta, además de que los derechos pertenecían a Televisa, así que se negó. Dreamworks, la empresa productora de Spielberg, la hizo de todos modos sin consultarle; se llamó "What Lies Beneath" (en español, Revelaciones), con Harrison Ford y Michelle Pfeiffer, dirigida por Robert Zemeckis en el año 2000. Con toda la mano de un churro taquillero, este refrito recaudó 120 millones de dólares en salas, e incluye una escena igual. La escena del espejo en Morirse en domingo es un homenaje, o más bien una respuesta, a Robert Zemeckis, en donde Gruener hace lo mismo "pero más chingón y sin dinero", una manera fina de hacerle ver a Zemeckis que "yo sé que tú sabes".

Desde hace dos años, Daniel Gruener ha incursionado en la producción. Está produciendo la ópera prima de Carlos Carrera en animación: "Ana". También, prepara el guión para su próxima película, que se filmará casi toda en París y trata sobre una huérfana de madre que va en busca de su padre y termina encontrando muchas otras cosas. "Ya sé que dicen que yo filmo una película cada diez años; según eso, me faltan ocho para filmar este proyecto, pero yo espero que se filme en un año."

Gruener produjo también dos documentales que están a punto de estrenarse; el primero, titulado "Elvira", trata sobre Elvira Arellano, la primera indocumentada que alzó la voz después de vivir escondida un año dentro de una iglesia para evitar que la policía estadounidense la deportara, separándola de su hijo, y luego se trasladó a Los Ángeles a liderear una manifestación. Este documental se estrenará en el festival de Morelia, a principios de octubre. El segundo documental que produjo recientemente se estrenará el mismo mes en el festival DOCS DF, y se titula "Beijing Ren"; trata sobre un talentoso joven mexicano que es el primer latinoamericano que logra estudiar cine en Beijing.

Daniel participó este año en el Rally Malahierba, organizado hace un par de meses en Playa del Carmen, para el cual fueron convocados diez directores jóvenes (Mariana Chenillo, Beto Gómez, Daniel Gruener, Julián Hernández, Issa López, Gustavo Loza, Alejandro Lozano, Elisa Miller, Lucía Puenzo y el invitado honorario Ignacio Ortiz), con la propuesta de realizar un cortometraje en 24 horas. El resultado de este peliagudo rally espera su estreno en el Festival de Guadalajara, en marzo de 2010; el corto de Daniel Gruener trata sobre el inicio y el fin del mundo.

En fin, para cerrar el resumen sobre Morirse en domingo, esperemos que esta película se quede con ustedes, que les deje algo. Y si no la han visto, que la vean, pues en palabras del público "esta no es una película que se pueda contar, tienes que verla, muestra varias plataformas de la realidad."

martes, 15 de septiembre de 2009

SÁBADO 19: Morirse en domingo

Queridos amigos,

Este sábado los invitamos a ver una divertida comedia de humor negro, Morirse en domingo, que trata, en palabras del director, sobre "el negocio de la muerte, un tema del que se ha hablado poco en México. Todo surge de una historia que le sucedió al guionista de la película, Antonio Armonía, y a su familia, cuando su tío murió un domingo. Armonía me platicó su peregrinar para sepultarlo; al no poder pagar un Gayosso abrieron la Sección Amarilla y encontraron una funeraria chiquita y económica. Una de las peores cosas es la muerte de un integrante de la familia en domingo o en un feriado, son los peores días, sobre todo para las que no tienen para pagar los gastos del sepelio".

Gruener, egresado del Centro de Capacitación Cinematográfica, precisó: "Es una historia de vivos y sobrevivientes, de los que se pasan de lanza. De cómo la sociedad mexicana en su conjunto se ha vuelto especialista en librar el orden para encontrar la salida más fácil a los problemas; todos traemos una agenda personal donde escondemos pequeñas mentiras, que en su conjunto crean nuestra realidad: la sobrevivencia diaria. Eso me interesaba mostrar, esa capacidad del mexicano de encontrar una salida, esa doble moral de 'no me paso el semáforo siempre y cuando no tenga prisa'. Así es la película: todo está muy bien mientras no necesite burlar la ley, en el momento en que lo necesito, la infrinjo".

Morirse en domingo

Director: Daniel Gruener
Guionista: Antonio Armonía
País de Origen: México
Género: Comedia Dramatica
Año: 2007
Duración: 98 minutos (según el IMDB dura 125... ya veremos)
Música: Gabriel González
Productores: Susana Zabaleta y Daniel Gruener

Distribución:
Gussi Artecinema
Fotografía:
Guillermo Granillo González
Edición:
Gabriel Rodríguez “Choco”


Los esperamos en nuestra sede, la Escuela de Escritores de Sogem, con el aroma del café.

¡Abróchense los cinturones!


Fuentes:

http://www.jornada.unam.mx/2007/02/16/index.php?section=espectaculos&article=a08n1esp

http://www.biosstars-mx.com/pelicula/2007/m/morirse_en_domingo.html

sábado, 12 de septiembre de 2009

Todos los días son tuyos

por Lila Nieto

Les compartimos a continuación algunos puntos que se discutieron en el debate de esta tarde con José Luis Gutiérrez Arias, tras la función de su ópera prima, "Todos los días son tuyos".

Filmada con un presupuesto de trece millones de pesos (que resulta baratísima aún para los presupuestos mexicanos, que andan por los 19 millones en promedio), equivalentes más o menos a un millón de euros, en España no le creían a José Luis cuando les platicó el dato. El guión se tuvo que ajustar a este presupuesto, pues en principio era bastante más ambicioso; por ejemplo, incluía tomas aéreas, escenas en Estados Unidos para el personaje de María, tres coches para persecusiones y choques, más escenas de acción y tres cámaras. El guión definitivo, un noveno tratamiento, se ahorró estos caprichos; sin embargo, más que perder, la película ganó valor en el suspenso alcanzado y, por supuesto, en la creatividad que se requirió para sacarlo adelante.

El proyecto tenía ofertas para coproducción no sólo en España, sino también con varias compañías productoras y distribuidoras en México, pero los estatutos de la UNAM (pues el CUEC es la escuela de cine de esa institución) no permite ningún tipo de coproducción, y es por esto que José Luis tuvo que renunciar a estas jugosas ofertas y ajustarse al presupuesto disponible, que era de diez millones de pesos, lo cual alcanzó para rodar el filme, pero no para postproducirlo.

José Luis fue periodista antes que cineasta, y trabajaba en la sección de "Internacionales", por lo que estaba enterado de muchas noticias a las que no se les dio cauce en los medios masivos de comunicación, como la persecusión de vascos ligados con el movimiento independentista de ese país. José Luis hizo hincapié en no llamarlos "etarras", pues la mayoría de los vascos que residen en el continente americano no pertenecen al brazo armado, la ETA, que es una mafia terrorista, sino que son hijos de líderes independentistas con ideología de izquierda que buscan promocionar y financiar la independencia del país Vasco desde acá.

Existió en la década de los años ochenta una organización financiada por el gobierno español llamada GAL, que funcionaba exactamente como una organización terrorista, pero al revés; es decir, eran una especie de "contraguerrilla", cazadores de terroristas que provocaban, con actos de la misma naturaleza, que los terroristas reaccionaran para tener pretexto de acusarlos, perseguirlos y encarcelarlos. Desafortunadamente, la ETA se ha corrompido, y la mayoría de las personas que cometen actos violentos en su nombre son adolescentes y jóvenes a quienes se les han inculcado ideas extremistas y acaban cometiendo actos de vandalismo en nombre de la "Kale Borroka" y después cargan con sentencias muy duras, de hasta treinta años de cárcel. Tampoco significa que todos los jóvenes reclutados terminen siendo miembros de la organización. Este caso está representado por el personaje de María, quien en realidad lo que quiere es salir de la organización y desaparecer en Estados Unidos. Los asesinatos y actos terroristas no son cometidos por estos jóvenes desorientados, sino por miembros declarados de la ETA que ya son adultos y que, por estos crímenes, son sentenciados a cientos -a veces miles- de años de prisión. Los viejos líderes del movimiento separatista luchan a través de medios legales políticos por la causa independentista, y no están involucrados con la ETA.

Efectivamente existió una atractiva sicaria despiadada, temida a lo largo y ancho del país Vasco, a quien llamaban "La Rubia". Esta mujer cometió por lo menos dos asesinatos a sangre fría en México, protegida por los gobiernos español y mexicano. En el pasado, ella perteneció a la GAL, el ala "antiterrorista" del gobierno español, por lo que estuvo algunos años en la cárcel. Después, en el gobierno de Aznar, se convirtió en una mercenaria, y fue entonces, durante el gobierno de Vicente Fox, que estuvo en México persiguiendo vascos. Después de sus andanzas aquí, desapareció. Dicen que, en realidad, usaba una peluca rubia, y que tenía el pelo oscuro y corto. Este personaje "de película" inspiró en gran medida a José Luis a escribir este thriller político que en España molestó bastante, pues toca un tema muy delicado y complejo.

En realidad, lo que más molesta al gobierno español, no son tanto los terroristas, pues sus actos no necesitan justificarse para ser perseguidos. En cambio, los líderes separatistas que buscan la libertad de su pueblo expresando su ideología de izquierda, son más incómodos, hacen más ruido. Es por esto que se desató la persecusión de vascos en países como Venezuela y México. El caso más sonado de este tema fue cuando Baltazar Garzón, juez español, salió de un juzgado mexicano después de interrogar a un detenido vasco, cosa que es ilegal. Después, no se le dio mucho seguimiento al caso en las noticias.

Otra razón por la cual no se difundió casi nada esta película en España es que querían doblar los diálogos en vasco al español, cosa que José Luis no aceptó. En México, aunque se ha logrado rescatar algunas cosas desde la destrucción de la industria cinematográfica en el sexenio de Salinas de Gortari -con el Tratado de Libre Comercio- (como por ejemplo que las óperas primas deben quedarse más tiempo en cartelera), la falta de difusión fue la clave para que esta película pasara tan de prisa por la cartelera, y tan desapercibida. Además, los exhibidores tenían en la cola la siguiente película de James Bond; ya sabemos la preferencia que tienen las exhibidoras, y el público en general, por el cine hollywoodense.

El guión ganó primero el concurso de apoyo a líneas argumentales de IMCINE, con lo que José Luis lo sometió a taller con Flavio González Mello, dramaturgo y guionista mexicano. Después, el proyecto ganó la beca de la Fundación Carolina, y José Luis viajó a España para seguirlo trabajando allá con guionistas renombrados, entre los cuales se encuentran David Muñoz, coguionista de "El espinazo del diablo", y Fernando Castest, de "El hijo de la novia". Después, ganó el concurso para la quinta ópera prima del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC), de la UNAM.

"Cuando escribes un guión, tienes que imaginarte al actor que quieres que represente a tu personaje, aunque esté muerto". Por esto, José Luis siempre visualizó a Emma Suárez, su amor platónico de adolescencia, como "La Rubia", y a Alejandro Camacho como el comandante Carbajal. A Emma le interesó el proyecto porque nunca había representado a una antagonista despiadada, sino que siempre salía de guapa, de madre sufrida y cosas así. Tal fue su compromiso con el proyecto que consiguió el vestuario para su personaje donado por Hugo Boss, lo cual después permitió conseguir parte de los tres millones faltantes para la postproducción, pues subastaron algunas de las prendas después del rodaje. El dinero restante para la postproducción lo puso la distribuidora, Zeta David. En cuanto a Alejandro Camacho, sólo tiene la cara de malo, pues fue un placer trabajar con él, ya que es muy disciplinado y simpático. Al público le dio gusto verlo de vuelta en la pantalla corregido y aumentado, después de haber desaparecido durante años, incluso de la televisión.

La ciudad de México es muy difícil de fotografiar, pues la luz es muy intensa y directa. "A veces ves fotos que dices 'qué bonita', pero se tomó en Europa, donde siempre está nublado", y las nubes funcionan como difusor de luz. En México se ha adoptado en muchos proyectos una estética de "realismo" por la dureza de la luz que hay en la ciudad. Los fotógrafos del CUEC han adquirido mucho oficio y creatividad para lograr el efecto que desean, no sólo porque tienen poco equipo sino también porque casi todos los estudiantes quieren ser directores, por lo que quienes se especializan en fotografía siempre tienen mucho trabajo, y crean oficio. La fotografía de esta película aporta mucho a la narrativa, pues se diseñó en función de los personajes, de los momentos y los diálogos específicos a lo largo de la historia.

El público estuvo de acuerdo en que la construcción de personajes y el guión son de primer orden, entre otras cosas, porque resultan verosímiles en el contexto nacional. José Luis no trató de imitar un thriller a la "gringa" sino que creó las situaciones y los personajes de acuerdo con la lógica de funcionamiento mexicanos. Por ejemplo, la prisa de los políticos por encontrar culpables muchas veces obliga a los policías a detener a personas inocentes, y más adelante aparecen los verdaderos culpables. También, el personaje de Camacho, un policía más conciente, más culto, mejor vestido, existe aunque ustedes no lo crean. El Santanero, en cambio, representa a la vieja guardia de policías extracorruptos y vulgares de la judicial.

De igual manera, este guión denuncia la frivolidad y corrupción de la prensa de nota roja, que hace tratos con la policía para conseguir noticias sin el menor sentido ético.

Por último, el título, que en un principio José Luis rescató de un desgarrado poema de Jorge Cuesta, también es un fragmento de la oración a la Santa Muerte. Por eso, él dice que la película "se ganó" el título, aunque también aceptó que fue su capricho. Sin embargo, esta frase romántica y obsesiva sigue la tradición del cine negro norteamericano de los cincuentas, con títulos como "Kiss Me Deadly". La intención del autor era mostrar la transformación del personaje principal, Eliseo, quien al principio no muestra ningún respeto por la muerte y, al verla de cerca, cambia totalmente su visión.

La próxima película de José Luis Gutiérrez se titula "Abril y Mayo". Se comenzará a rodar en octubre y se estrenará en algún momento del año que entra. Se trata de otro thriller, pero esta vez en forma de road-movie. Estén atentos para verla la primera semana que esté en cartelera, ya saben que de esto depende su permanencia, pues ya no tendrá los "privilegios" de una ópera prima.

Bueno, basta de choros, esto es más o menos el resumen del sabroso debate de hoy.

¡Abróchense los cinturones!

domingo, 6 de septiembre de 2009

SÁBADO 12: Todos los días son tuyos

Cinéfilos, amantes del thriller, de la nota roja,

Este sábado 12 de septiembre de 2009 a las 18:00 los invitamos a la proyección de una película interesante por varias razones. Ópera prima de José Luis Gutiérrez, el guión muestra su talento como narrador y como creador de personajes, y la dirección, aunque tiene detalles discutibles, es muy buena, sobre todo tratándose de su primer largometraje.

El hecho de que sea una historia con una investigación detrás, la hace más sólida, más valiente, y nos acerca a aspectos de nuestra realidad sobre los cuales no tenemos mucha idea. Según su autor, este filme “es de género negro, policíaco negro, negrísimo, ambientado en México, muy mexicano”.

Todos los días son tuyos

Quinta ópera prima del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos(CUEC)

(México, 2007, 120 min, 35 mm, Color, Dolby Digital)
Producción: CUEC – UNAM / FOPROCINE / IMCINE
Dirección y guión: José Luis Gutiérrez
Productor: Armando Casas
Producción ejecutiva: Roberto Fiesco
Director de producción: Karl Lenin González
Reparto: Mario Oliver, Alejandro Camacho, Emma Suárez, Bárbara Lennie, Josefo Ortiz, Mariannela Cataño, Josean Bengoetxea, Juan Ríos, Mikel Tello, Javier Escobar, entre otros

“El título de la cinta es parte de una oración a la Santísima Muerte, que dice: ‘Santísima Muerte, Todos los días son tuyos, déjame vivir uno más’. Me gusta mucho la connotación que puede parecer romántica, que tiene su parte obsesiva, lo que también juega en la historia. Realmente estamos hablando de una película sobre la violencia desde el punto de vista de que estamos acostumbrándonos mucho a ella como sociedad. Entonces el despertar de la violencia que tiene el personaje principal, que se llama Eliseo, para quien la violencia cotidiana es su forma de vida, cuando le toca de cerca ya no ve la muerte de la misma manera, y es lo que pretendo, que como sociedad tengamos conciencia real de lo que es la muerte y no caigamos en 'te asaltaron, ah, qué bueno que no te mataron'”.

José Luis Gutiérrez Arias

Egresado en 1998 del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos, fue el ganador del concurso para la realización de la quinta ópera prima del CUEC, “Todos los días son tuyos”, cuya filmación se llevó a cabo con un presupuesto aproximado de un millón 200 mil dólares en siete semanas de filmación.

Filmografía

Cuentos para solitarios (1999, serie de TV)
-La mano (dirección y guión)
-Los amantes de Bulgaria (guión)
-Marisol en la playa, frente al mar y algunas rocas (guión)
Todos los días son tuyos (2007)

Vengan a verla y a platicar con José Luis, quien será el invitado especial de nuestro cineclub.
Los esperamos en nuestra sede habitual, la Escuela de Escritores de Sogem.

¡Abróchense los cinturones!

Fuentes:

“Las poquianchis” y “Canoa”:

Les compartimos un texto que nos envió Obed González, amigo del cineclub, en este "mes patrio". Supongo que esto nos invita a proyectar estas dos películas en algún momento no muy lejano. Por lo pronto, Canoa se va a proyectar en el Cineclub de la Ciudad (Mérida 56, col. Roma) el jueves 24 de septiembre.

“Las poquianchis” y “Canoa”

Cine tomado de los mitos y costumbres de un pueblo

por Obed González

Retomando dos películas del ensayo “La nota roja y policíaca en el cine mexicano: análisis sociológico de 100 años de cine nacional”, las adaptamos al siguiente escrito como la memoria de ciertos días que debemos recordar para crecer como individuos y sociedad. Realizo la adaptación para las personas que se preocupan por el cine y la cultura, porque es un trabajo importante el que desempeñan y a veces ni siquiera nos damos cuenta. La realizo como un pequeño grano de arena para el Cineclub Jaime Casillas de la SOGEM como homenaje a uno de mis mejores maestros y personas que me ha tomado de la mano y a las personas que realizan esta labor por el gusto que da vivir.

Las Poquianchis

Uno de los casos más sonados dentro de la nota roja, investigado y publicado como dicen en el argot penitenciario de punta a cola, fue el de Las Poquianchis. Investigación realizada por el afamado periódico “La alarma” a través del periodista Jesús Sánchez Hermosillo.

Felipe Cazals ve en este acontecimiento una veta rica en situaciones, temas y enfoques. Combina el caso de Las Poquianchis con un tema social de otra índole, como lo es la expropiación de tierras; pero realmente muy pocas personas recuerdan esta combinación, puesto que el tema central era muy fuerte y de escándalo nacional, lo cual opacó la atención del otro.

Jesús Sánchez Hermosillo es propuesto por Carlos Samayoa Lizárraga, director del periódico, para cerciorarse de los rumores que cada vez eran más constantes con relación a estas mujeres, y Sánchez Hermosillo se traslada a Guanajuato para apoyar la veracidad de la noticia, donde se encuentra con un caso de lenocinio (alcahuetería), asesinato, secuestro, corrupción y tolerancia social, entre otros.

En en aquella década, Felipe Cazals fue muy prolífico, con realizaciones como “Zapata (1971), El jardín de la tía Isabel (1972), Aquellos años (1973), y la llamada "Trilogía del tremendismo": Canoa (1975), El apando (1975) y Las poquianchis (1976). Cazals realiza la historia de Delfina, María de Jesús y Eva González Valenzuela, proxenetas que llevaban de pueblo en pueblo su prostíbulo con la complacencia de las autoridades del estado, que a la postre se lavaron las manos y no sólo les dieron la espalda, sino que se encargaron de echarle más leña al fuego.

Cazals recrea ese medio, en el cual se desarrolla la historia: el prostíbulo pintado con colores fuertes, la rokcola sonando mambo y boleros, los políticos de pueblo negociando con las madrotas, mujeres tristes bailando tropezadamente con ebrios de abultadas barrigas. En la casa de las hermanas: una virgen se ve al entrar, las poquianchis de negro, como guardando un luto eterno, un rosario entre las manos de Delfa (Leonor LLausás) y en las de Chuy (Malena Doria) el dinero ganado con el sudor de los cuerpos de sus “protegidas”, mientras se lame el dedo pulgar para contarlo. En la recámara: estampitas de santos sobre los burós, la fotografía del hijo de Delfa, una veladora y un crucifijo sobre la pared. Los lugares de encierro: sucios; ventanas con vidrios rotos, no tienen agua, las mujeres apestan y enferman de disentería, defecan en el suelo y son muertas a golpes y zapatazos en la cabeza por las mismas compañeras de suplicio. En la más terrible, podrida y asqueada vida que las lenonas han creado para ellas.

Durante el juicio, Las poquianchis son violentadas en sus derechos y se le imputan más delitos de los que realmente han cometido; ellas, otras mujeres y algunos hombres que trabajaban para el burdel son sentenciados por las mismas autoridades que antes las protegían.

Es un mundo cruel y repulsivo donde cada quien se vomita a sí mismo y a los demás, pero al mismo tiempo son víctimas, hasta las mismas Poquianchis, que son blanco de las autoridades, prensa, iglesia y sociedad, lo que provoca en una de ellas la locura. En una escena, Chuy le dice a un reportero (Salvador Sánchez) que se acerque para realizarle una confesión; al arrimarse el reportero, Chuy le avienta excremento de un bote que le sirve como excusado, y ríen como si hubiesen traspasado la cordura.

Tomás Pérez Turrent realiza la investigación y el guión en conjunto con otros escritores, y logran una cruda versión de algunas de las involucradas en el caso, entre ellas Adelina, participante del homicidio de su propia hermana y la cual denota una total indiferencia ante su acto.

Este hecho altera a la sociedad mexicana, al darse cuenta de la poca confiabilidad de sus autoridades -que la prensa deja al descubierto- y la tolerancia que existe en nuestro país hacia la prostitución, el secuestro y la trata de personas, además de los delitos que se cometen en contra de las comunidades olvidadas por la misma sociedad.

Canoa

Otro caso, que aunque no tuvo la difusión y el escándalo que el anterior por ser un asunto aislado y de efímera duración, no deja de ser un acontecimiento violento y estremecedor, que conmovió a la población nacional y en especial al estado de Puebla, fue el sucedido en el pueblo de San Juan Canoa.

Felipe Cazals reabre el archivo siete años después del linchamiento y masacre de cinco trabajadores de La Universidad de Puebla, en Septiembre de 1968; otra vez con la investigación y estudio de Tomás Pérez Turrent, quien realizó las entrevistas a los afectados de aquella tragedia y tuvo que indagar en el pueblo donde se suscitó el hecho, Canoa (1975) es el trabajo más meritorio por el cual se recuerda a Tomás Pérez Turrent.

En Canoa, unos trabajadores de La Universidad de Puebla organizan una excursión al cerro de La Malinche, pero por inclemencias del tiempo tienen que realizar escala en el pueblo de San Juan Canoa. Cazals aprovecha la lluvia para darle más dramatismo a la cinta, y llevar la historia desde la entrada al pueblo a un final apocalíptico.

Al pedir posada en la iglesia del poblado, son echados y amenazados con un rifle sin una causa aparente. Para su mala suerte, conocen a un hombre que junto con dos mujeres los invita a pasar la noche en casa de un pariente; y digo mala suerte, porque este personaje es el único en el pueblo que se opone a las fechorías del padre local, por lo cual es odiado en el terreno. Les platica de los atropellos que comete el sacerdote con la gente de San Juan: quitar el agua a quien no pague o no dé limosna, y pedir dinero para la construcciones de fuentes, altares, jardineras para la iglesia o remodelación de la capilla. También comenta que él es quien anuncia por medio de la radio local a quienes no dieron limosna o deben algún milagro.

La película manifiesta un sentido político y social con relación a las actitudes y tratos por parte de los habitantes, el sacerdote y las autoridades del lugar. El miedo y la ignorancia hacen presa fácil de la violencia al pueblo. Llevados por el temor a lo desconocido, entran belicosamente a la vivienda donde pernoctan los trabajadores, e intentan lincharlos.

La atmósfera que el cineasta recrea es bastante violenta e indignante: la húmeda noche, las gotas revolviéndose con los rumores, la marea de antorchas encendidas, los agudos murmullos, las trompetas enardeciendo las cabezas. Cuando vemos la puerta oponiéndose al pueblo y que termina por ceder, el seco palazo en la cabeza al dueño de la casa, la sangre correr por su nuca, comprenden que van a morir. Algunos de los pobladores intentan calmar a sus congéneres, pero la turba rabiosa no piensa.

Es el resultado de la falta de educación, de la manipulación a través de la fe, de la ignorancia. Mientras el pueblo hiere y mata a unos inocentes, dos habitantes de San Juan Canoa que están viendo la acción conversan, un lugareño pregunta a otro: “¿Y cómo siguen sus animalitos compadre?”.

Esto lo hace deliberadamente Turrent, para darnos una idea del nivel cultural que existe en este México tan lleno de carencias y creencias, mientras el presidente municipal se emborracha en un pueblo vecino.

El filme es un docudrama bien pensado por parte de Cazals y Pérez Turrent. Incluyen a Salvador Sánchez como un cronista del lugar que explica la extensión del territorio, población, servicios y otros datos, además de los usos y costumbres de la localidad. La película se tuvo que filmar en un pueblo cercano al real, por el temor al linchamiento. Hay que reconocer el enorme valor de Tomás Pérez Turrent para estudiar e investigar el suceso, estando muy fresco todavía lo ocurrido. La película es una denuncia argumentada a través de un hecho verídico, que hizo pensar a las personas de mediados de los sesentas, y en especial a los jóvenes.

La cinta constituye una crítica al gobierno y la iglesia, y es la proyección de la realidad, la cruda y desastrosa realidad de los años sesentas en México, que un mes después confirmaría el gobierno en la Plaza de las Tres Culturas de Tlatelolco, con el genocidio del 2 de Octubre de 1968.

Textos tomados del libro ganador del Segundo lugar internacional de ensayo en el “Primer Concurso Interdisciplinario de Arte 2007” en Argentina.

sábado, 5 de septiembre de 2009

La leyenda de la Nahuala

por Lila Nieto

Esta tarde, a pesar de la lluvia, nuestro público llegó a ver la proyección de esta película de animación mexicana que ganó el Ariel al mejor largometraje de animación en 2007.

Aquí les compartimos algunas de las cosas que se discutieron en el debate con Soco Aguilar, quien formó parte del equipo de producción ejecutiva.

El tiempo de preproducción y realización de una película de animación es mucho mayor, y mucho más caro que el de una película hecha con actores. Por ejemplo, para este proyecto, se sumó el talento y el arduo trabajo de unos cien animadores repartidos en dos estudios en la ciudad de México, uno en Puebla y, en un estudio de Chile se mandaron hacer cinco minutos para terminar la película en tiempos.

Los primeros meses de la preproducción, que duró alrededor de un año, el equipo de producción trabajó sin remuneración, pues el dinero se tardó mucho en llegar. El proceso de realización duró alrededor de nueve meses. Sin embargo, el tiempo que se tardó en terminar este proyecto, y el costo (19 millones de pesos que ahora equivalen más o menos a 26 millones, es decir, dos millones de dólares), son mucho menores a los presupuestos y tiempos que se manejan en una animación, por ejemplo, de Pixar, para las que se destinan hasta dos años sólo para la preproducción, y se utiliza un presupuesto con el que se podrían hacer unas cuatro o cinco películas en México.

Para La leyenda de la Nahuala se utilizó un software especializado que se compró en Canadá. Antes de hacer la animación en forma, y habiendo trabajado ocho tratamientos del guión, se compuso un borrador llamado Animatic, que es una especie de story-board (historieta) para que los actores presten su voz e interpretación. Esto se graba en audio y video y sirve para que los animadores puedan crear a los personajes, empatándolos con los gestos y movimientos de los actores.

Aunque esta película se cuenta entre los estrenos mexicanos que más éxito han tenido en taquilla, pues se recaudaron las entradas de 1.2 millones de espectadores que sumaron unos 43 millones de pesos, los productores todavía siguen pagando sus deudas. Esto se debe a que, del dinero que se recauda, más del 60% se destina a los exhibidores, 20% a los distribuidores, 15% a la Secretaría de Hacienda, y sólo 1.5% para pagar a los autores (guionistas, actores, animadores, directores, productores, etc.)

Curiosamente, aunque esta animación llena de colorido y sincretismo ha recorrido diversos festivales en todo el mundo, sólo cuentan con una versión digital subtitulada al inglés, y estos subtítulos no son muy exactos, por lo que los públicos extranjeros han tenido que sacar en muchas ocasiones sus propias conclusiones sobre lo que narra esta historia. Pero todavía no cuentan con un DVD que incluya subtítulos en ningún idioma. Sin embargo, ha tenido muy buena recepción en todos los rincones en donde se ha exhibido. Algunos de los aspectos que más se han admirado de la animación son los fondos, que muestran detalles como la talavera, los vitrales o las calaveritas de azúcar.

Soco Aguilar contó cómo a partir de esta historia ha logrado acercar a nuevas generaciones de niños mexicanos a elementos de la tradición cultural como el día de muertos o lo que es un alebrije, pues no sólo en otros países se desconocen a veces, sino que en nuestra propia tierra se han ido perdiendo. Aún así, la absoluta libertad con que la historia de la famosa Llorona se dibujó en este filme ha sido bastante criticada en México.

Para finales de este año, el equipo que realizó esta película estrenará un nuevo proyecto llamado Nikté, una historia relacionada con la cultura Olmeca.

Por último, y no es por presumir, se acentuó la importancia y el valor de que existan espacios como nuestro cineclub en donde el público puede acceder a películas que ya salieron de cartelera, y además aprender de primera mano sobre aspectos del proceso de creación de un filme que de otra manera quizás no conocerían. Los cineclubes son espacios que ayudan a mantener vivo el cine, y a extender su apreciación mucho más allá de la cartelera comercial.

Visiten la página de La leyenda de la Nahuala en: http://www.nahuala.com.mx/

jueves, 3 de septiembre de 2009

SÁBADO 5: La leyenda de la nahuala

Cinéfilos,

Vengan a ver la función inaugural de nuestro nuevo ciclo de cine mexicano contemporáneo este SÁBADO 5 DE SEPTIEMBRE A LAS 18:00.

Estará con nosotros SOCO AGUILAR, productora de la película, para debatir al final de la proyección.

Vengan con sus hijos, con sus sobrinos, con sus nietos, con el niño que tienen dentro.

Los esperamos con el aroma del café en nuestra sede habitual, la Escuela de Escritores de Sogem.

martes, 1 de septiembre de 2009

CARTELERA: Cine mexicano contemporáneo


Queridos amigos,

Esta vez, del 5 de septiembre al 10 de octubre de 2009, traemos a nuestro espacio una colección de películas mexicanas recientes que estuvieron en cartelera, pero que seguramente algunos de ustedes no alcanzaron.

Como es nuestra costumbre, traemos a cada función a un expositor invitado que estuvo involucrado en la realización de la película y que compartirá con nosotros su experiencia. Esto es un regalo; no tendrán la oportunidad de intercambiar información y opiniones con los creadores de estas películas así nomás en la calle, eh? Vienen los directores, los guionistas, los productores.

El ciclo consta de películas de diversos géneros: animación, thriller, comedia, documental y un rompecabezas de historias cortas.

Todas son interesantes, todas valen la pena, todas serán analizadas en el debate final.

No se las pierdan, y....

¡Abróchense los cinturones!