sábado, 12 de septiembre de 2009

Todos los días son tuyos

por Lila Nieto

Les compartimos a continuación algunos puntos que se discutieron en el debate de esta tarde con José Luis Gutiérrez Arias, tras la función de su ópera prima, "Todos los días son tuyos".

Filmada con un presupuesto de trece millones de pesos (que resulta baratísima aún para los presupuestos mexicanos, que andan por los 19 millones en promedio), equivalentes más o menos a un millón de euros, en España no le creían a José Luis cuando les platicó el dato. El guión se tuvo que ajustar a este presupuesto, pues en principio era bastante más ambicioso; por ejemplo, incluía tomas aéreas, escenas en Estados Unidos para el personaje de María, tres coches para persecusiones y choques, más escenas de acción y tres cámaras. El guión definitivo, un noveno tratamiento, se ahorró estos caprichos; sin embargo, más que perder, la película ganó valor en el suspenso alcanzado y, por supuesto, en la creatividad que se requirió para sacarlo adelante.

El proyecto tenía ofertas para coproducción no sólo en España, sino también con varias compañías productoras y distribuidoras en México, pero los estatutos de la UNAM (pues el CUEC es la escuela de cine de esa institución) no permite ningún tipo de coproducción, y es por esto que José Luis tuvo que renunciar a estas jugosas ofertas y ajustarse al presupuesto disponible, que era de diez millones de pesos, lo cual alcanzó para rodar el filme, pero no para postproducirlo.

José Luis fue periodista antes que cineasta, y trabajaba en la sección de "Internacionales", por lo que estaba enterado de muchas noticias a las que no se les dio cauce en los medios masivos de comunicación, como la persecusión de vascos ligados con el movimiento independentista de ese país. José Luis hizo hincapié en no llamarlos "etarras", pues la mayoría de los vascos que residen en el continente americano no pertenecen al brazo armado, la ETA, que es una mafia terrorista, sino que son hijos de líderes independentistas con ideología de izquierda que buscan promocionar y financiar la independencia del país Vasco desde acá.

Existió en la década de los años ochenta una organización financiada por el gobierno español llamada GAL, que funcionaba exactamente como una organización terrorista, pero al revés; es decir, eran una especie de "contraguerrilla", cazadores de terroristas que provocaban, con actos de la misma naturaleza, que los terroristas reaccionaran para tener pretexto de acusarlos, perseguirlos y encarcelarlos. Desafortunadamente, la ETA se ha corrompido, y la mayoría de las personas que cometen actos violentos en su nombre son adolescentes y jóvenes a quienes se les han inculcado ideas extremistas y acaban cometiendo actos de vandalismo en nombre de la "Kale Borroka" y después cargan con sentencias muy duras, de hasta treinta años de cárcel. Tampoco significa que todos los jóvenes reclutados terminen siendo miembros de la organización. Este caso está representado por el personaje de María, quien en realidad lo que quiere es salir de la organización y desaparecer en Estados Unidos. Los asesinatos y actos terroristas no son cometidos por estos jóvenes desorientados, sino por miembros declarados de la ETA que ya son adultos y que, por estos crímenes, son sentenciados a cientos -a veces miles- de años de prisión. Los viejos líderes del movimiento separatista luchan a través de medios legales políticos por la causa independentista, y no están involucrados con la ETA.

Efectivamente existió una atractiva sicaria despiadada, temida a lo largo y ancho del país Vasco, a quien llamaban "La Rubia". Esta mujer cometió por lo menos dos asesinatos a sangre fría en México, protegida por los gobiernos español y mexicano. En el pasado, ella perteneció a la GAL, el ala "antiterrorista" del gobierno español, por lo que estuvo algunos años en la cárcel. Después, en el gobierno de Aznar, se convirtió en una mercenaria, y fue entonces, durante el gobierno de Vicente Fox, que estuvo en México persiguiendo vascos. Después de sus andanzas aquí, desapareció. Dicen que, en realidad, usaba una peluca rubia, y que tenía el pelo oscuro y corto. Este personaje "de película" inspiró en gran medida a José Luis a escribir este thriller político que en España molestó bastante, pues toca un tema muy delicado y complejo.

En realidad, lo que más molesta al gobierno español, no son tanto los terroristas, pues sus actos no necesitan justificarse para ser perseguidos. En cambio, los líderes separatistas que buscan la libertad de su pueblo expresando su ideología de izquierda, son más incómodos, hacen más ruido. Es por esto que se desató la persecusión de vascos en países como Venezuela y México. El caso más sonado de este tema fue cuando Baltazar Garzón, juez español, salió de un juzgado mexicano después de interrogar a un detenido vasco, cosa que es ilegal. Después, no se le dio mucho seguimiento al caso en las noticias.

Otra razón por la cual no se difundió casi nada esta película en España es que querían doblar los diálogos en vasco al español, cosa que José Luis no aceptó. En México, aunque se ha logrado rescatar algunas cosas desde la destrucción de la industria cinematográfica en el sexenio de Salinas de Gortari -con el Tratado de Libre Comercio- (como por ejemplo que las óperas primas deben quedarse más tiempo en cartelera), la falta de difusión fue la clave para que esta película pasara tan de prisa por la cartelera, y tan desapercibida. Además, los exhibidores tenían en la cola la siguiente película de James Bond; ya sabemos la preferencia que tienen las exhibidoras, y el público en general, por el cine hollywoodense.

El guión ganó primero el concurso de apoyo a líneas argumentales de IMCINE, con lo que José Luis lo sometió a taller con Flavio González Mello, dramaturgo y guionista mexicano. Después, el proyecto ganó la beca de la Fundación Carolina, y José Luis viajó a España para seguirlo trabajando allá con guionistas renombrados, entre los cuales se encuentran David Muñoz, coguionista de "El espinazo del diablo", y Fernando Castest, de "El hijo de la novia". Después, ganó el concurso para la quinta ópera prima del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC), de la UNAM.

"Cuando escribes un guión, tienes que imaginarte al actor que quieres que represente a tu personaje, aunque esté muerto". Por esto, José Luis siempre visualizó a Emma Suárez, su amor platónico de adolescencia, como "La Rubia", y a Alejandro Camacho como el comandante Carbajal. A Emma le interesó el proyecto porque nunca había representado a una antagonista despiadada, sino que siempre salía de guapa, de madre sufrida y cosas así. Tal fue su compromiso con el proyecto que consiguió el vestuario para su personaje donado por Hugo Boss, lo cual después permitió conseguir parte de los tres millones faltantes para la postproducción, pues subastaron algunas de las prendas después del rodaje. El dinero restante para la postproducción lo puso la distribuidora, Zeta David. En cuanto a Alejandro Camacho, sólo tiene la cara de malo, pues fue un placer trabajar con él, ya que es muy disciplinado y simpático. Al público le dio gusto verlo de vuelta en la pantalla corregido y aumentado, después de haber desaparecido durante años, incluso de la televisión.

La ciudad de México es muy difícil de fotografiar, pues la luz es muy intensa y directa. "A veces ves fotos que dices 'qué bonita', pero se tomó en Europa, donde siempre está nublado", y las nubes funcionan como difusor de luz. En México se ha adoptado en muchos proyectos una estética de "realismo" por la dureza de la luz que hay en la ciudad. Los fotógrafos del CUEC han adquirido mucho oficio y creatividad para lograr el efecto que desean, no sólo porque tienen poco equipo sino también porque casi todos los estudiantes quieren ser directores, por lo que quienes se especializan en fotografía siempre tienen mucho trabajo, y crean oficio. La fotografía de esta película aporta mucho a la narrativa, pues se diseñó en función de los personajes, de los momentos y los diálogos específicos a lo largo de la historia.

El público estuvo de acuerdo en que la construcción de personajes y el guión son de primer orden, entre otras cosas, porque resultan verosímiles en el contexto nacional. José Luis no trató de imitar un thriller a la "gringa" sino que creó las situaciones y los personajes de acuerdo con la lógica de funcionamiento mexicanos. Por ejemplo, la prisa de los políticos por encontrar culpables muchas veces obliga a los policías a detener a personas inocentes, y más adelante aparecen los verdaderos culpables. También, el personaje de Camacho, un policía más conciente, más culto, mejor vestido, existe aunque ustedes no lo crean. El Santanero, en cambio, representa a la vieja guardia de policías extracorruptos y vulgares de la judicial.

De igual manera, este guión denuncia la frivolidad y corrupción de la prensa de nota roja, que hace tratos con la policía para conseguir noticias sin el menor sentido ético.

Por último, el título, que en un principio José Luis rescató de un desgarrado poema de Jorge Cuesta, también es un fragmento de la oración a la Santa Muerte. Por eso, él dice que la película "se ganó" el título, aunque también aceptó que fue su capricho. Sin embargo, esta frase romántica y obsesiva sigue la tradición del cine negro norteamericano de los cincuentas, con títulos como "Kiss Me Deadly". La intención del autor era mostrar la transformación del personaje principal, Eliseo, quien al principio no muestra ningún respeto por la muerte y, al verla de cerca, cambia totalmente su visión.

La próxima película de José Luis Gutiérrez se titula "Abril y Mayo". Se comenzará a rodar en octubre y se estrenará en algún momento del año que entra. Se trata de otro thriller, pero esta vez en forma de road-movie. Estén atentos para verla la primera semana que esté en cartelera, ya saben que de esto depende su permanencia, pues ya no tendrá los "privilegios" de una ópera prima.

Bueno, basta de choros, esto es más o menos el resumen del sabroso debate de hoy.

¡Abróchense los cinturones!

3 comentarios:

  1. Buenísima. Lástima que no durara tanto tiempo en cartelera. Este el trabajo que vale la pena difundir. Otra palomita para el cineclub.

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  2. Esto si es cineclubismo de vanguardia. Bravo por el resumen. Muy interesante. Tengo ya ganas de ver la película aquí en España. Quizá en nuestro cineclub http//barcelonaespaicinema.blogspot.com

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  3. Muy completo el resumen! gran trabajo que comienza seleccionando películas, proyectando, debatiendo y superando lo efímero de la sesión dejando correr la pluma y el teclado. Enhorabuena, el cine mexicano necesita de ese alto voltaje. Felicidades.

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